domingo, 31 de diciembre de 2017

Let it bleed, 2017.

momentos finales del 2017 

 Domingo 31 de diciembre.  18:40
El fin.  Primer año de las victorias. No soy muy bueno con las despedidas y muy pocas veces lo he demostrado, al menos aquí. Pero de alguna forma debo decir adiós a este año de una forma razonable y definida. Qué mejor que unos versos medidos, una poesía caótica y melancólica sobre lo que fue, y lo escaso, casi nada, que deseé que pudo ser el 2017

Vagas entre miles de tierras desmoronadas y movedizas
casi en tu totalidad nadas por el eterno mar del pasado, 
contigo llevas lugares, nombres y fechas, 
también nadan contigo actos que revelan tu anatomía
y que describen tu moribundo estado.

Eres, por lo que percibo en memoria
el inicio de los años gloriosos,
me diste a probar fuentes doctas, repletas de sabiduría
y el desapego inherente de los vicios dichosos.

Eres los días de cambio, donde estudié la química de mi cuerpo
donde atestigué el cambio cada vez más real, y cercano.

Eras la prueba más viva de amistad,
lo dulce y amargo que puede ser un amor
El coraje de pelearlo sin piedad
Y la esperanza de ganar el afamado calor.

 Me presentaste a ________, en uno de tus días
cuando no la buscaba. Ahora me haces pedir que ella volteé hacia mí. 

Eres la prueba de fuerza,  eres el trauma de lo inestable que puede ser la vida. Eres la voz de muchas personas que hombro con hombro se unieron,  aunque fuiste durante la causa,  no estarás durante  la reconstrucción.

Eres como tus antepasados, el tiempo invertido en libros tan gritones,  en grandes videojuegos,  y en gloriosas platicas con compañeros. 
Eres la fortuna de haber escuchado música nueva, y la desgracia de aquellas piezas
 que se repetían hasta el cansancio.

Eres el pilar de nuevos pasos,
del imperio a construir
Las voces que ignoré, a las que hice caso 
Y el acto de crear como mi carrera a seguir

Eres el aullido,  el desesperar, 
el sueño inconcluso,
El acto de estúpidos problemas enterrar 
Y de quedarme como un iluso.

Eres la primera parte de muchas cosas
Promesas,  proyectos,  gente enamorada
Estaré aquí para verlos fluir de forma gloriosa

Existir, poco te queda para ser presente. 
Te llevas ideas y lo que cambió a la gente. 

¿Qué se le pide a un año moribundo? 
Que su nuevo reemplazo sea mejor. 
Una utopía desear que no cargue con desdicha, muerte y caos. 

Yo tendré,  algún día que pasar por ello. Por eso,  lo único que grito con gusto en cada una de las 365 oportunidades para callar 

Es que estoy vivo. 
Y viví el 2017 en grande.
Puedes nadar en paz, año viejo.
 Al menos el futuro me pertenece.

Sangra lo poco que te queda,  viéndome reír y disfrutar con familiares y saludar amigos a la lejanía, 
Piérdete en el mar del pasado con una fiesta dedicada a tu fin.


       Hector Miguel Aguilar Yañez (Enigma HM) 2017.